
Hermanamiento Agustinas de San Alonso de Orozco de Madrid y Agustinos Valencia
Visita al Monasterio de San Alonso de Orozco: Encuentro con la comunidad de Agustinas
El pasado 5 de abril, un grupo de docentes y representantes de la titularidad de nuestro colegio -P. Vicente y P. Adrián- tuvo el privilegio de visitar el Monasterio de San Alonso de Orozco, donde reside la comunidad de Madres Agustinas con la que mantenemos un vínculo especial de amadrinamiento espiritual.
Fuimos cálidamente recibidos por Madre Nuria y Sor Patricia, quienes, junto a la profesora Gloria —una profesional excepcional—, nos guiaron a través de las instalaciones de su Escuela Infantil (EI 0-3 años), un espacio profundamente cuidado y lleno de sentido educativo y espiritual.
Durante la visita, pudimos sumergirnos en el corazón de su proyecto pedagógico, inspirado en los pilares agustinianos de fraternidad, interioridad y servicio, con el Evangelio como modelo de vida. La experiencia nos invitó a reducir la fe a lo esencial, reencontrándonos con una vivencia sencilla, auténtica y profundamente renovadora de nuestra espiritualidad.
La belleza y el asombro que transmite el ambiente preparado para los más pequeños, así como el enfoque basado en la disciplina positiva, nos hablaron de una educación donde poner límites con amor y el desarrollo emocional van de la mano. A través de elementos del método Montessori, se fomenta la autonomía, el aprendizaje manipulativo, el silencio, y la tolerancia a la frustración, incluso en edades tan tempranas.
La conexión emocional, la ternura y la fe compartida nos dejaron frases que nos acompañarán largo tiempo: “lo bien que sienta ser bueno”, “pedir perdón” y “ver a Jesús en cada niño”. Pequeñas grandes enseñanzas que reactivan nuestras propias convicciones como educadores y creyentes.
La jornada concluyó con un breve pero significativo encuentro con la comunidad religiosa y la celebración de la Eucaristía, donde pudimos compartir oración, agradecimiento y esperanza.
Volvemos enriquecidos, inspirados y profundamente agradecidos por este tiempo de comunión fraterna, que refuerza nuestro compromiso educativo y espiritual.